El equipo rosado que se veía empatado hasta la última de las estancias con el equipo trujillano, la Universidad César Vallejo. Recordando que en la primera parte del torneo Sport Boys era puntero absoluto, y al empezar la segunda rueda esto empezó a cambiar. La tabla se movía porque todos los equipos querían la ansiada punta y así subir. Tanta era la ambición que algunos empezaron a comprar equipos, arbitros y comisarios. Pero con todo y contra todo, Sport Boys se llevó el título de campeón de la segunda profesional.

Todo Cuzco era una fiesta. Pues la hinchada lo hizo sentir así. Sport Boys era local. Los rosados celebraban en Cuzco, en Lima, en el Callao y en todas partes del Perú. Porque se lo merecía, porque este era su año y porque no hay justicia divina que se pueda comprar, ni un equipo que no pueda lograr su objetivo cuando esta tan unido y enfocado como lo estuvo Sport Boys todo este tiempo.
Mis felicitaciones a todos los que conforman este plantel. Celebren mi querido Callao. Nos vemos el próximo año en primera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario